martes, 17 de mayo de 2011

En Macaracuay aprenden a separar los desechos sólidos

Varias urbanizaciones del este caraqueño (Cumbres de Curumo, Santa Cecilia, Caurimare) tienen más de diez años reciclando vidrio gracias a un proyecto que diseñó la compañía Owens Illinois.

Ahora, Macaracuay se suma a la onda verde con una experiencia piloto que ya recibió el visto bueno dentro de los proyectos que financia la Alcaldía de Sucre, vía presupuesto participativo. Son 69 mil bolívares fuertes los destinados a la iniciativa.

Entre mayo y julio se realizaron tres talleres teórico-prácticos sobre manejo de desechos sólidos para los vecinos de la urbanización. Luego se diseñaron pancartas, pendones, afiches y volantes que a partir de la próxima semana estarán anunciando la nueva forma de separar la basura en las avenidas San Francisco, Luis de Camoes, y Naiguatá.

Cuando María Yánez, integrante de Asomacaracuay, esbozó su idea no recibió la mayor acogida entre los vecinos. "Siempre se piensa en infraestructura y en cámaras de seguridad, casi nunca en el ambiente. Por eso me sorprendió cuando me informaron que la Alcaldía había aprobado el proyecto. Macaracuay es una urbanización grande que genera mucha basura, el reciclaje beneficiará a una población estimada en 500 mil personas".

Los contenedores llegarán a la urbanización en el mes de octubre, tienen un metro cuarenta de ancho, tapa y están divididos en tres espacios para albergar vidrio, plástico-latas y papel-cartón. Una empresa privada los donará a la Alcaldía de Sucre. Julia de Franco, otra de las vecinas a cargo del proyecto, explicó que se ha hecho énfasis en incluir a las conserjes de los edificios en los talleres de formación, pues ellas son una pieza clave en el proceso de reciclaje. Cuando comiencen las clases se involucrará también a los colegios de la zona.

Se tiene previsto pedir apoyo al Excelsior Gama de Macaracuay para que provea a las instituciones educativas de contenedores, pues la cadena de supermercados ya ha donado papeleras ecológicas a algunos edificios.

Además de disminuir los volúmenes de basura el objetivo a largo plazo es que el reciclaje genere recursos que puedan ser invertidos en la comunidad con la venta de los materiales.

Desde hace más de cuatro años los vecinos de Macaracuay costean íntegramente los gastos de mantenimiento de la plaza Chacao de la urbanización. Son proyectos como estos los que se benefician del reciclaje.

Mariel Carrillo

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